Cómo cambiar hábitos poco favorables.

"El poder del hábito es grande" (Proverbio latino).

Por Eduardo Contreras.

Hábitos.

En general los hábitos son aquellas acciones que realizas día con día de manera automática, o sin pensar concientemente que lo estás haciendo. Por ejemplo, cuando te levantas y te cepillas los dientes, te lavas la cara, te peinas, te vistes, todas esas acciones que realizas día con día en automático. Sin embargo, a veces hay hábitos que son poco favorables o contraproducentes y pueden afectar tu salud, bienestar, economía, etc. Por ello, el día de hoy quiero darte algunas recomendaciones para modificar este tipo de hábitos, por ejemplo, si quieres dejar de consumir alimentos poco saludables, si quieres hacer ejercicio, si quieres dejar de fumar, si quieres dejar de beber alcohol o de comprar compulsivamente, etc.

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Recomendaciones para modificar tus hábitos.

1. Identifica el hábito que quieres modificar y después las señales que lo activan. Es decir, cuáles son esos estímulos que causan que respondas con ese hábito. Por ejemplo, si quieres cambiar el hábito de comprar de manera compulsiva y de pronto te reúnes con tus amigos y salen a un centro comercial, en donde hay una gran cantidad de señales o de estímulos que van a activar tu hábito. Entonces identifica esas señales o momentos, cuál es el lugar, a dónde, cómo, con quién la hora o lo que se relacione con tu hábito.
2. Identifica cuál es tu respuesta ante esas señales. Para poder modificar el hábito, tienes que centrarte en modificar esa respuesta. Es decir, si vas al centro comercial y ves que hay tiendas, te va a funcionar que tengas mucha fuerza de voluntad para poder resistirte a comprar. Lo mejor sería evitar este tipo de lugares para evitar las señales y evitar que respondas a ellas, pero, bueno a veces no se puede controlar y es inevitable que te expongas a ello. Por lo tanto, debes centrarte en tener fuerza de voluntad y no responder a esas señales para poder modificar tu hábito. Es decir, tener un plan a la hora de que te expongas a esos estímulos para responder de una manera diferente.
3. Recompénsate por haber respondido diferente a las señales. ¿A qué me refiero? Los hábitos que se repiten y que son contraproducentes generalmente se refuerzan porque hay recompensas neurológicas. Es decir, si tienes el hábito de comer en la calle comida que contiene muchas calorías o azúcares (el azúcar es un súper estímulo para el cerebro, es una recompensa neurológica), que es la causa de que se repita el hábito de comer comida poco saludable. Por lo tanto, debes identificar cuáles son esas recompensas neurológicas que están reforzando tu hábito y cambiarlas por recompensas que te ayuden a modificarlo. Por ejemplo, si vas al centro comercial y ante las señales o estímulos de las tiendas o de los productos, tienes fuerza de voluntad y no respondes ante ello, entonces puedes recompensarte por el hecho de haber logrado no comprar de manera compulsiva, ¿cómo?, a lo mejor puedes tu mismo/a hacer una apuesta personal, es decir, puedes obtener cierto grado de satisfacción por conseguirlo, también puedes elogiarte a ti mismo/a, o tal vez ver un rato la televisión, hacerte una taza de café o chocolate, leer un libro que te gusta o navegar un poco en internet para recompensar la conducta que te ayuda a modificar el hábito indeseado.
4. Creé que este método funciona para modificar tu hábito. El creerlo te ayudará a reforzar el cambio del mismo. Es decir, piensa que día con día lo vas a lograr si perseveras. También busca una red de apoyo para poder compartir este tipo de creencias y hablar con personas que piensan igual que tú y que te pueden ayudar a reforzar el cambio del hábito poco favorable.

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Bien, nos leemos pronto y recuerda que sin salud mental no hay salud, hasta luego.